20 Ago ORACIÓN DEL DÍA Martes 20 agosto 2024
Canto: Cristo Jesús, mi luz interior
1ª LECTURA: Ezequiel 28, 1-10
Me fue dirigida esta palabra del Señor:
«Hijo de hombre, di al príncipe de Tiro: Esto dice el Señor Dios:
Se enalteció tu corazón, y dijiste: “Soy un dios y estoy sentado en el trono de los dioses en el corazón del mar”.
Tú que eres hombre y no dios, pusiste tu corazón como el corazón de Dios.
Te dijiste: “¡Si eres más sabio que Daniel, ningún enigma se te resiste!
Con tu sabiduría e inteligencia, te has hecho una fortuna; acumulaste tesoros de oro y plata”.
Con gran habilidad para el comercio acrecentaste tu fortuna,; y por tu fortuna te llenaste de presunción.
Por ello, así dice el Señor Dios:
“Por haber puesto tu corazón como el corazón de Dios, por eso, haré venir contra extranjeros los más feroces de entre los pueblos.
Desenvainarán sus espadas contra tu brillante sabiduría y profanarán tu belleza.
Te hundirán en la fosa, y perecerás de muerte violenta en el corazón del mar.
¿Podrás seguir diciendo delante de tus verdugos: ‘Soy un dios’? Serás un hombre, y no un dios, en mano de los que te apuñalen?
Morirás con muerte de incircunciso, a manos de gentes extrañas.
Porque lo he dicho yo.» – oráculo del Señor -»
Palabra de Dios.
SALMO: Dt 32, 26-27ab. 27cd-28. 30. 35cd-36ab
ANTÍFONA: Yo doy la muerte y la vida.
Yo pensaba: «Voy a dispersarlos
y a borrar su memoria entre los hombres.»
Pero no; que temo la jactancia del enemigo
y la mala interpretación del adversario.
Que diría: «Nuestra mano ha vencido,
no es el Señor quien lo ha hecho. »
Porque son una nación que ha perdido el juicio.
¿Cómo es que uno persigue a mil,
y dos ponen en fuga a diez mil?
¿No es porque su Roca los ha vendido,
porque el Señor los ha entregado?
El día de su perdición se acerca,
y su suerte se apresura.
Porque el Señor defenderá a su pueblo
y tendrá compasión de sus siervos.
ANTÍFONA: Yo doy la muerte y la vida.
EVANGELIO: San Mateo 19, 23-30
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
«En verdad os digo que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Lo repito: más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de los cielos».
Al oírlo, los discípulos dijeron espantados:
«Entonces, ¿quién puede salvarse?».
Jesús se les quedó mirando y les dijo:
«Es imposible para los hombres, pero Dios lo puede todo».
Entonces dijo Pedro a Jesús:
«Ya ves, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido; ¿qué nos va a tocar? ».
Jesús les dijo:
«En verdad os digo: cuando llegue la renovación, y el Hijo del hombre se siente en el trono de su gloria, también vosotros, los que me habéis seguido, os sentaréis en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.
Todo el que por mí deja casa, hermanos o hermanas, padre o madre, mujer, hijos o tierras, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna.
Pero muchos primeros serán últimos y muchos últimos serán primeros».
Palabra del Señor
ORAR CON LOS SANTOS:
Mi Dios y mi todo, a pesar de mis ingratitudes, no quiero resistir más. Aquí me tienes, dispuesto a dejarlo todo. Así seré todo tuyo. Demasiado has hecho para ganar mi amor. (San Alfonso Mª de Ligorio)
SANTOS DEL DÍA:
Bernardo, abad y doctor; Adoindo, Máximo, Erberto, obispos; Advino, Amador, Maneto, Donorcio, confesores; Brígida, abadesa; Cristóbal, Leovigildo, Porfirio, Eudosia, Seronio, Severo, Memnon, Lucio, mártires; Filiberto, abad; Osvino, rey; Samuel, profeta.