27 Sep ORACIÓN DEL DÍA
Canto: Espera en el Señor.
1ª LECTURA: Ageo 2, 1-9
El año segundo del reinado de Darío, el día veintiuno del mes séptimo, llegó la palabra del Señor por medio del profeta Ageo:
«Di a Zorobabel, hijo de Sesltiel, gobernador de Judá, a Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y al resto de la gente:
“¿Quién de entre vosotros queda de los que vieron este templo en su primitivo esplendor? Y el que veis ahora, ¿no os parece que no vale nada?
Ánimo, pues Zorobabel – oráculo del Señor -; ánimo también tú, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote.
¡Ánimo gentes todas! – oráculo del Señor -. ¡Adelante, que yo estoy con vosotros! – oráculo del Señor del universo -.
Ahí está mi palabra, la que os di al sacaros de Egipto, y mi espíritu está en medio de vosotros: no temáis.
Pues esto dice el Señor del universo:
Dentro de poco haré temblar cielos y tierra, mares y tierra firme. Haré temblar a todos los pueblos, que vendrán con todas sus riquezas y llenaré este templo de gloria, dice el Señor del universo.
Míos son la plata y el oro – oráculo del Señor del universo -.
Mayor será la gloria de este segundo templo que la del primero – dice el Señor del universo.
Y derramaré paz y prosperidad en este lugar, oráculo del Señor del universo”».
Palabra de Dios.
SALMO: Sal 42, 1. 2. 3. 4
ANTÍFONA: Espera en Dios, que volverás a alabarlo: «Salud de mi rostro, Dios mío.»
Hazme justicia, oh Dios, defiende mi causa
contra gente sin piedad,
sálvame del hombre traidor y malvado.
Tú eres mi Dios y protector,
¿por qué me rechazas?,
¿por qué voy andando sombrío,
hostigado por mi enemigo?
Envía tu luz y tu verdad:
que ellas me guíen
y me conduzcan hasta tu monte santo,
hasta tu morada.
Que yo me acerque al altar de Dios,
al Dios de mi alegría;
que te dé gracias al son de la cítara,
Dios, Dios mío.
ANTÍFONA: Espera en Dios, que volverás a alabarlo: «Salud de mi rostro, Dios mío.»
EVANGELIO: San Lucas 9, 18-22
Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó:
-«¿Quién dice la gente que soy yo?»
Ellos contestaron:
-«Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.»
Él les preguntó:
-«Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?»
Pedro tomó la palabra y dijo:
-«El Mesías de Dios.»
Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y añadió:
-«El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día. »
Palabra del Señor
ORAR CON LOS SANTOS:
En verdad es muy necesaria la mansedumbre cuando hemos de reprender a alguno. Las reprensiones dadas con amargura frecuentemente hacen más daño que provecho, especialmente cuando el amonestado está enojado. En esos momentos conviene abstenerse de la corrección y esperar el momento en que haya desaparecido el ímpetu de la ira. (San Alfonso Mª de Ligorio)
SANTOS DEL DÍA:
Vicente de Paúl, presbítero y fundador; Antimo, Leoncio, Euprepio, Adolfo, Juan, Florenciano, Hilario, Fidencio, Terencio, Epicaris o Epicarides, mártires; Elceario, conde, Fintán, confesores; Diosdado, abad; Sigeberto, rey; Cayo, Marcos, Abderico, obispos; Hiltrudis, virgen.
ORACIÓN VIERNES 27 SEPTIEMBRE 2019