09 Oct Oración 10 octubre 2017
CANTO: Cristo Jesús.
1ª LECTURA: Jonás 3, 1-10
El Señor dirigió la palabra por segunda vez a Jonás. Le dijo así:
«Ponte en marcha y ve a la gran ciudad de Nínive, allí les anunciarás el mensaje que yo te comunicaré».
Jonás se puso en marcha hacia Nínive, siguiendo la orden del Señor . Nínive era una ciudad inmensa; hacían falta tres días para recorrerla.
Jonás empezó a recorrer la ciudad el primer día, proclamando:
«Dentro de cuarenta días Nínive será arrasada»
Los ninivitas creyeron en Dios; proclamaron un ayuno y se vistieron con rudo sayal, desde el más importante al menor.
La noticia llegó a oídos del rey de Nínive, que se levantó del trono, se despojó del manto real, se cubrió con rudo sayal y se sentó sobre el polvo. Después ordenó proclamar en Nínive este anuncio de parte del rey y de sus ministros:
«Que hombres y animales, ganado mayor y menor no coman nada; que no pasten ni beban agua. Que hombres y animales se cubran con rudo sayal e invoquen a Dios con ardor. Que cada cual se convierta de su mal camino y abandone la violencia. ¡Quién sabe si Dios cambiará y se compadecerá, se arrepentirá de su violenta ira y no nos destruirá.!».
Vio Dios su comportamiento, cómo habían abandonado el mal camino, y se arrepintió de la desgracia que había determinado enviarles. Así que no la ejecutó.
Palabra de Dios.
SALMO: Sal 129, 1-2. 3-4. 7bc-8
ANTÍFONA: Si llevas cuentas de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir?
Desde lo hondo a ti grito, Señor;
Señor, escucha mi voz;
estén tus oídos atentos
a la voz de mi súplica.
Si llevas cuenta de los delitos, Señor,
¿quién podrá resistir?
Pero de ti procede el perdón,
y así infundes respeto.
Porque del Señor viene la misericordia,
la redención copiosa;
y él redimirá a Israel
de todos sus delitos.
ANTÍFONA: Si llevas cuentas de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir?
EVANGELIO: San Lucas 10, 38-42
En aquel tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa.
Ésta tenía una hermana llamada María, que, sentada junto a los pies del Señor, escuchaba su palabra.
Marta, en cambio, andaba muy afanada con los muchos servicios; hasta que, acercándose, dijo:
«Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para servir? Dile que me eche una mano».
Respondiendo, le dijo el Señor:
«Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; sólo una es necesaria. María, pues ha escogido la parte mejor, y no le será quitada».
Palabra del Señor.
ORAR CON LOS SANTOS:
Oh Jesús mío. Tu muerte por mí hace que no pueda resistirme a tu amor. Como me amas con tanta fuerza, y como deseas que yo te ame así, yo quiero amarte sobre todas las cosas. Señor, sólo confío en tener tu amor. Únicamente deseo amarte a ti. (San Alfonso Mª de Ligorio)
SANTOS DEL DÍA:
Tomás de Villanueva, Claro, Pinito, Paulino, Cerbonio, obispos; Eulampio y Eulampia, Venancio, Daniel, Samuel, Ángel, León, Nicolás, Hugolino, Gereón, Alderico, Basian, Víctor, Casio, Florencio, Eusebio, Heraclio, Dionisio, Septimio, Septimia, Segunda, Ealsa, mártires; Teófilo, monje; Telquilda, virgen; Zacarías, Nuncio, confesores.