14 Mar Rezar en Cuaresma – 15 marzo 2013
San Clemente Mª Hofbauer
Canto: Tu fidelidad es grande, tu fidelidad incomparable es.
Nadie como Tú, Bendito Dios. Grande es tu fidelidad.
SALMO 116
ANTÍFONA: Id al mundo entero y proclamad el Evangelio.
Id al mundo entero y proclamad el Evangelio.
Alabad al Señor todas las naciones,
aclamadlo todos los pueblos.
Firme es su misericordia con nosotros,
su fidelidad dura por siempre.
ANTÍFONA: Id al mundo entero y proclamad el Evangelio.
LECTURA DEL EVANGELIO: San Lucas 10,1-9
En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos, y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares a donde pensaba ir él. Y les decía:
-La mies es abundante y los obreros poco; rogad, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies. ¡Poneos en camino! Mirad que os mando como corderos en medio de lobos. No llevéis talega, ni alforja, ni sandalias, y no os detengáis a saludar a nadie por el camino. Cuando entréis en una casa, decid primero: “Paz a esta casa”. Y si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos vuestra paz; si no, volverá a vosotros.
Quedaos en la misma casa, comed y bebed de lo que tengan, porque el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa. Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comed lo que os pongan, curad a los enfermos que haya, y decid: “Está cerca de vosotros el reino de Dios”.
PETICIONES:
- Te pedimos por la Congregación del Santísimo Redentor y por toda la Familia Redentorista, para que seamos fieles al carisma de nuestro Padre Fundador.
- Te pedimos para que seamos fieles al anuncio del Evangelio y nos apoyemos en San Clemente Mª Hofbauer abriendo nuevos caminos de evangelización.
- Por los jóvenes que están en discernimiento vocacional para que ante las dificultades abran su corazón al Redentor.
PADRE NUESTRO.
AVE MARÍA.
COMPROMISO: Ayuna. Prívate de algún capricho, pero no para creerte mejor, sino para sentirte en comunión con la Iglesia.
ORACIÓN FINAL.
Señor, ¿qué quieres de mí hoy? ¿Qué me pides?
Señor, ¿cuál es tu proyecto sobre mi vida? ¿qué tarea quieres que realice?
Señor, ¿a qué me llamas? ¿cómo puedo cumplir tu voluntad, y no la mía?
Señor, ¿qué me puede hacer más feliz? ¿qué puede ayudar a mis hermanos?
Señor, ¿qué paso puedo dar en esta Cuaresma, y resucitar contigo en la Pascua?
Aquí estoy, Señor, disponible.
Estoy aquí para responder a tu llamada.
Para San Clemente María,
tu llamada fue sólo el sonido de una campana.
De los muchos sonidos que llegan a mis oídos cada día:
¿cuál es tu voz?
Aquí me tienes, Señor, para hacer tu voluntad.