24 septiembre 2016

24 septiembre 2016

Canto: Abre mis labios.
 
1ª LECTURA: Eclesiastés 11, 9-12, 8
Disfruta mientras eres muchacho y pásalo bien en la juventud; déjate llevar del corazón y de lo que te recrea la vista; pero sábete que Dios te llevará a juicio para dar cuenta de todo.
Rechaza las penas del corazón y rehúye los dolores del cuerpo: adolescencia y juventud son efímeras.
Acuérdate de tu Creador en tus años mozos, antes de que lleguen los días aciagos y te alcancen los años en que digas: «No les saco gusto»; antes de que se oscurezcan el sol, la luna y las estrellas, y tras la lluvia vuelva el nublado.
Ese día temblarán los guardianes de la casa, y los valientes se encorvarán; las que muelen serán pocas y se pararán, los que miran por las ventanas se ofuscarán, las puertas de la calle se cerrarán y el ruido del molino será solo un eco; se debilitará el canto de los pájaros, las canciones se irán apagando; darán miedo las alturas y en las calles rondarán los terrores; cuando florezca el almendro y se arrastre la langosta y sea ineficaz la alcaparra; porque el hombre va a la morada de su eternidad y el cortejo fúnebre recorre las calles.
Antes de que se rompa el hilo de planta, y se destroce la copa de oro, y se quiebre el cántaro en la fuente, y se raje la polea del pozo, y el polvo vuelva a la tierra que fue, y el espíritu vuelva al Dios que lo dio.
Vanidad de vanidades, dice Qohelet, vanidad de vanidades, todo es vanidad.
Palabra de Dios.
 
SALMO: Sal 89, 3-4. 5-6. 12-13. 14 y 17
ANTÍFONA: Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación.
Tú reduces el hombre a polvo,
diciendo: «Retornad, hijos de Adán.»
Mil años en tu presencia
son un ayer, que pasó;
una vela nocturna.
Los siembras año por año,
como hierba que se renueva:
que florece y se renueva por la mañana,
y por la tarde la siegan y se seca.
Enséñanos a calcular nuestros años,
para que adquiramos un corazón sensato.
Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo?
Ten compasión de tus siervos.
Por la mañana sácianos de tu misericordia,
y toda nuestra vida será alegría y júbilo.
Baje a nosotros la bondad del Señor
y haga prósperas las obras de nuestras manos.
ANTÍFONA: Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación.
 
EVANGELIO: San Lucas 9, 43b-45
En aquel tiempo, entre la admiración general por lo que hacía, Jesús dijo a sus discípulos:
-«Meteos bien en los oídos estas palabras: al Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres».
Pero ellos no entendían este lenguaje; les resultaba tan oscuro que no captaban el sentido.
Y les daba miedo preguntarle sobre el asunto.
Palabra del Señor
 
ORAR CON LOS SANTOS:
Quien de corazón ama al Redentor, nunca está de mal humor, pues, como sólo quiere lo que Dios quiere, siempre tiene lo que desea y permanece tranquilo y ecuánime. La voluntad divina le sosiega y serena en todas las adversidades que le suceden, por lo que practica una mansedumbre total para con todos. Mas esta mansedumbre no se puede alcanzar sin un gran amor a Jesucristo. (San Alfonso Mª de Ligorio)
 
SANTOS DEL DÍA:
Nuestra Señora de la Merced. Santos: Ama, virgen; Andoquio, Tirso, Félix, Pacífico, Pafnucio, Pablo, Tata, Sabiniano, Máximo, Rufo, Eugenio, mártires; Anatolón, Roberto, confesores; Gerardo, Rústico, obispos; Esteban, rey de Serbia; Terencio, patriarca; Geremaro, abad.