23 Dic 24 diciembre 2018
NOCHEBUENA
Canto: Iubilate Deo
1ª LECTURA: Isaías 62, 1-5
Por amor de Sión no callaré, por amor de Jerusalén no descansaré, hasta que rompa la aurora de su justicia, y su salvación llamee como antorcha.
Los pueblos verán tu justicia, y los reyes tu gloria; te pondrán un nombre nuevo, pronunciado por la boca del Señor.
Serás corona fúlgida en la mano del Señor y diadema real en la palma de tu Dios.
Ya no te llamarán «Abandonada», ni a tu tierra «Devastada»; a ti te llamarán «Mi predilecta», y a tu tierra «Desposada», porque el Señor te prefiere a ti, y tu tierra tendrá un esposo.
Como un joven se desposa con una doncella, así te desposan tus constructores.
Como se regocija el marido con su esposa, se regocija tu Dios contigo.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 88
ANTÍFONA: Cantaré eternamente tus misericordias, Señor
«Sellé una alianza con mi elegido,
jurando a David, mi siervo:
Te fundaré un linaje perpetuo,
edificaré tu trono para todas las edades».
Dichoso el pueblo que sabe aclamarte:
caminará, oh Señor, a la luz de tu rostro;
tu nombre es su gozo cada día,
tu justicia es su orgullo.
Él me invocará: “Tú eres mi padre,
mi Dios, mi Roca salvadora”.
Le mantendré eternamente mi favor,
y mi alianza con él será estable.
ANTÍFONA: Cantaré eternamente tus misericordias, Señor
LECTURA DEL EVANGELIO: San Mateo 1, 1-25
Libro del origen de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán.
Abrahán engendró a Isaac, Isaac engendró a Jacob, Jacob engendró a Judá y a sus hermanos. Judá engendró, de Tamar, a Farés y a Zará, Farés engendró a Esrón, Esrón engendró a Arán, Arán engendró a Aminadab, Aminadab engendró a Naasón, Naasón engendró a Salmón, Salmón engendró, de Rajab, a Booz; Booz engendró, de Rut, a Obed; Obed engendró a Jesé, Jesé engendró a David, el rey.
David, de la mujer de Urías, engendró a Salomón, Salomón engendró a Roboán, Roboán engendró a Abías, Abías engendró a Asaf, Asaf engendró a Josafat, Josafat engendró a Jorán, Jorán engendró a Ozías, Ozías engendró a Joatán, Joatán engendró a Acaz, Acaz engendró a Ezequías, Ezequias engendró a Manasés, Manasés engendró a Amós, Amós engendró a Josías; Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando el destierro de Babilonia.
Después del destierro de Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel engendró a Zorobabel, Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliaquin, Eliaquin engendró a Azor, Azor engendró a Sadoc, Sadoc engendró a Aquín, Aquín engendró a Eliud, Eliud engendró a Eleazar, Eleazar a Matán, Matán engendró a Jacob; y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo. Así, las generaciones desde Abrahán a David fueron en total catorce; desde David hasta la deportación a Babilonia, catorce; y desde la deportación a Babilonia hasta el Cristo. catorce.
El generación de Jesucristo fue de esta manera:
María, su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo.
José, su esposo, que era justo y no quería difamarla, decidió repudiarla en privado. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo:
«José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados».
Todo esto sucedió para que se cumpliese lo que había dicho el Señor por medio del Profeta:
«Mirad: la virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa «Dios-con-nosotros»».
Cuando José se despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y acogió a su mujer.
Y sin haberla conocido, ella dio a luz un hijo al que puso por nombre Jesús.
Palabra del Señor.
PETICIONES:
Te pedimos por todos los habitantes de la tierra, para que en esta noche, sientan la voz del Ángel que les comunica la gran noticia: “Nos ha nacido el Salvador”.
Te pedimos por los que esta noche están solos, para que sientan el calor de una mano cercana.
Te pedimos por nuestra familia Redentorista para que hagamos como los ángeles de Belén: anunciar a todos que ha nacido el Salvador y trae la paz a los hombres de buena voluntad.
PADRE NUESTRO.
AVE MARÍA.
PREPARATE junto a tu familia, canta, celebra y brinda por la llegada del Salvador.
ORACIÓN FINAL. (San Alfonso)
Has bajado del cielo
para ser nuestro amigo y compañero,
pero ¿quién te acompaña?
¿quién te acoge en Belén?
Sólo José y María.
Se manifiesta
tu gracia salvadora,
y muy pocos quieren acogerla.
Eres para nosotros un hermano
y te consideramos extranjero.
¡Oh Palabra de Dios
hecha carne por mí!
Aunque te veo pobre
Y desvalido,
hoy te confieso como mi Señor.
Aquí tienes mi alma;
tómala por pesebre y por trono.
¡Oh rey de la humildad!
toma el mando de mi corazón
y no dejes que otro me domine.
¡¡¡¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!!!!!