18 Jul 19 julio 2013
1ª LECTURA: Éxodo 11, 10-12, 14
En aquellos días, Moisés y Aarón hicieron muchos prodigios en presencia del Faraón; pero el Señor hizo que el Faraón se empeñara en no dejar marchar a los israelitas de su territorio.
Dijo el Señor a Moisés y a Aarón en tierra de Egipto:
-«Este mes será para vosotros el principal de los meses; será para vosotros el primer mes del año. Decid a toda la asamblea de Israel: «El diez de este mes cada uno procurará un animal para su familia, uno por casa. Si la familia es demasiado pequeña para comérselo, que se junte con el vecino de casa, hasta completar el número de personas; y cada uno comerá su parte hasta terminarlo. Será un animal sin defecto, macho, de un año, cordero o cabrito. Lo guardaréis hasta el día catorce del mes, y toda la asamblea de Israel lo matará al atardecer. Tomaréis la sangre y rociaréis las dos jambas y el dintel de la casa donde lo hayáis comido. Esa noche comeréis la carne, asada a fuego, comeréis panes sin fermentar y verduras amargas. No comeréis de ella nada crudo ni cocido en agua, sino asado a fuego: con cabeza, patas y entrañas. No dejaréis restos para la mañana siguiente; y, si sobra algo, lo quemaréis. Y lo comeréis así: la cintura ceñida, las sandalias en los pies, un bastón en la mano; y os lo comeréis a toda prisa, porque es la Pascua, el paso del Señor. Esta noche pasaré por todo el país de Egipto, dando muerte a todos sus primogénitos, de hombres y de animales; y haré justicia de todos los dioses de Egipto. Yo soy el Señor. La sangre será vuestra señal en las casas donde estéis; cuando vea la sangre, pasaré de largo; no os tocará la plaga exterminadora, cuando yo pase hiriendo a Egipto. Este día será para vosotros memorable, en él celebraréis la fiesta del Señor, ley perpetua para todas las generaciones.» »
Palabra de Dios.
SALMO: Sal 115, 12-13. 15-16bc. 17-18
ANTÍFONA: Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor.
¿Cómo pagaré al todo el bien que me ha hecho?
Alzaré la copa de la salvación,
invocando su nombre.
Mucho le cuesta al Señor la muerte de sus fieles.
Siervo tuyo soy, hijo de tu esclava:
rompiste mis cadenas.
Te ofreceré un sacrificio de alabanza,
invocando tu nombre, Señor.
Cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo.
ANTÍFONA: Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor.
EVANGELIO: San Mateo 12. 1-8
Un sábado de aquéllos, Jesús atravesaba un sembrado; los discípulos, que tenían hambre, empezaron a arrancar espigas y a comérselas. Los fariseos, al verlo, le dijeron:
-«Mira, tus discípulos están haciendo una cosa que no está permitida en sábado.»
Les replicó:
-«¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y sus hombres sintieron hambre? Entró en la casa de Dios y comieron de los panes presentados, cosa que no les estaba permitida ni a él ni a sus compañeros, sino sólo a los sacerdotes. ¿Y no habéis leído en la Ley que los sacerdotes pueden violar el sábado en el templo sin incurrir en culpa? Pues os digo que aquí hay uno que es más que el templo. Si comprendierais lo que significa «quiero misericordia y no sacrificio», no condenaríais a los que no tienen culpa. Porque el Hijo del hombre es señor del sábado.»
Palabra del Señor
ORAR CON LOS SANTOS:
El respeto que se le debe a Dios no puede ser excusa para hablar sin llaneza con Él, ya que tan grande es su bondad, al menos, como su majestad. Y no se desdeña, antes se complace en que le trates con suma libertad y ternura. “Como una madre abraza a su pequeño, así os consolaré yo a vosotros” dice el Señor por medio de Isaías (Is 66,13) (San Alfonso Mª de Ligorio)
SANTOS DEL DÍA:
Ambrosio, Antonio, Teodoro, Osén, Pedro Crosci, confesores; Áurea, Epafras, Macedonio, Justa, Rufina, Lampiros, Lilaria, Tecla, mártires; Reticio, Bernoldo, Liberio, Lorenzo, Martín, Félix, obispos; Símaco, papa; Macrina, virgen; Arsenio, anacoreta.